Por Roberta Traspadini para Brasil de Fato.

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¿Quiénes son los piratas?

La piratería es uno de los temas más polémicos, instalados por los medios en pleno capitalismo monopólico del siglo XXI

10/07/2009

Roberta Traspadini

Educadora popular, economista e integrante de Consulta Popular

La pirateria es uno de los temas más polémicos, instalados por los medios en pleno capitalismo monopólico del siglo XXI. Según el consejo nacional de combate a la piratería (Brasil), se estima que 45% de la población brasileña, consuma algún tipo de producto pirateado. Frente a este dato podemos discutir, de manera plural, el significado real de legalidad y legitimidad.

Pero, vale decir que, a partir del enfoque de la economía política, interpretamos que, si se transformó en una práctica social, es porque está legitimado por la sociedad brasileña, aunque pueda ser interpretado por el Estado y por los dueños privados de las mercaderías, como ilegal.

Hagamos un ejercicio y veamos como, es en esencia, lo que es ocultado en los noticieros y en la industria cultural mediática, es el verdadero sentido colocado en la lucha de clases sobre este tema. Comencemos con algumas preguntas básicas:

1. ¿Qué es la piratería?

Es la copia de un original, cuya autoria es de otro. En términos formales, “crimen de violación de derecho de autor”.

2. ¿Qué es un producto original?

Es aquel que, al ser hecho por alguien, se transforma en propriedad privada de este alguien (producto mercadería y producto intelectual). Propriedad ésta garantizada sobre la tutela del Estado formal, y exige que todos los que la utilizan, pidan la bendición (economicamente paguen una parte expresiva) a aquellos que lo produjeron.

3. ¿Cuándo un producto original se transforma en el productor de copias?

Cuando el objetivo principal de su utilización es prestar este tipo de servicio. Ejemplo: hacer fotocopias de libros, de discos, de dvd´s.

4. ¿Cuándo la copia es violación?

Cuando el original, matriz productora de copias, es utilizado por terceros sin pagar su parte , o, pasa a ser un medio para otros medios y no el fin último del servicio.

En otras palabras, parte expresiva de la copia utilizada como piratería, vienen de productos originales que formalizan su propagación. Esas máquinas, cada vez más potentes y portátiles, implementan un ritmo absurdo de producción de copias no controladas por el propio capital monopólico.

Cuando esto ocurre, el capital - que comienza a ver su control burlado, a partir de las propias máquinas producidas por él-, define como piratería ilegítima e ilegal. O sea, una acción de producción y de consumo ejercida por contraventores sobre la orden burguesa de propriedad privada del capital.

Ya para los trabajadores, el problema no es el de la originalidad de la copia. Y si del desarrollo capitalista en si mismo excluyente, apropriador privado de la producción de la riqueza y de la renta. Producción esta que permitió a una parte expresiva de la población mundial, encontrar mecanismos de supervivencia, frente a, la cada vez menor, mano de obra formal de los tres sectores económicos.

El problema de fondo de esta discusión no es del orden moral y si económico. O sea, ¿quien se queda con la parte expresiva de aquello que es generado, independiente de la mediación hecha por la máquina formalmente registrada? ¿El propio capital? ¿O los trabajadores que imposibilitados de acceder al proceso formal de trabajo, encuentran la posibilidad de sobrevivir legitimamente a partir de la piratería?

La informalidad, en una sociedad como la brasileña, cuya exclusión es cercana a la barbarie social, tiene como mínimo algunas facetas que deben ser llevadas en consideración:

1. Es legitima y legal, cuando su fin es la supervivencia de parte expresiva de un contingente de trabajadores condenados de la tierra, transformada en propriedad privada por el capital, que ni siquiera entra para los números del ejército industrial de reserva, y que encuentra en esta actividad uno de los únicos mecanismos de ser minimamente incluído, frente a la real exclusión. Ej: vendedores ambulantes, vendedores de cd´s, dvd´s, entre otros. En algunos casos, en lo que se refiere a lo informal, el Estado puede asumirlo inclusive como emprendedor, para, al formalizarlo, garantizar tributos todavía mas valiosos para el erario.

2. Es legitima pero ilegal, cuando el Estado, asumiendo su representación de clase, resuelve hacer una limpieza social, moral, pero que realmente es del orden del poder económico, entre los que actúan fuera o dentro de la ley.

3. Es ilegítima e ilegal, cuando su principio, medio y fin es la muerte de muchos, frente a la vida de pocos. Ese es el caso específico del tráfico de armas, de drogas, de mujeres, de órganos, entre otros. Para sobrevivir algunos, muchos tienen que morir para hacer la producción circular en forma de ganancia excesiva y ampliada.

La legitimidad y legalidad de la piratería en Brasil, debe ser analizada a la luz del conflicto de clases generado por la consolidación del capital que va, poco a poco, o aprisionando al trabajo y esclavizandolo de múltiples formas, de acuerdo al tiempo histórico en que se vive, o excluyéndolo formalmente para incluírlo como consumidor.

Hay violaciones anteriores a dicha violación de la piratería. Listemos algunas:

1. Violación del derecho al trabajo y al salario digno. Un desempleo que llega al nivel del 8% y una población economicamente activa en que menos de 50% de los que actúan son formalmente registrados (en blanco).

   Violación de la remuneración digna cuando una parte expresiva de los trabajadores formales gana hasta dos salarios mínimos por mes y no tienen las garantias constitucionales de salud, educación, vivienda, entre otras.

2. Violación del derecho a disputa de clase, via Estado de derecho, cuando el capital define, a partir de su poder omnipotente, no sólo las reglas del juego, sino la forma como el árbitro debe comportarse (Estado brasileño).

3. Violación de los derechos consolidados como CLT y Constitución Federal. Ambos están transformándose en enciclopedia para consulta sobre como fue y dejó de ser el proceso laboral brasileño a lo largo de los siglos XX XXI.

4. Violación de los iguales delante la ley y a los tres poderes, cuando el Estado castiga en vez de prevenir; juzga en vez de democratizar el acceso; criminaliza-aprisiona en vez de liberar al trabajador de las amarras opresoras del capital.

Ante este cuadro actual de precarización, exclusión formal y criminalización de lo informal, liderada por el capital, y su raíces dentro del Estado brasileño, queda entonces una cuestión final a ser debatida por todos: ¿quién define al crimen y al criminal, en una sociedad que historicamente tiene a la violación como centro de irradiación del poder del capital contra el trabajo en esta sociedad en que derechos sociales y humanos fueron relegados al último plano, frente a la supremacia del derecho individual de la propriedad?

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