miércoles, 22 de julio de 2009

Amazon ya lo había hecho antes...(borrar libros del Kindle)

Si no sabe qué es el Kindle puede ver acá abajo un video que explica qué es:








En otra entrada habíamos dejado la noticia de que Amazon decidió borrar de los dispositivos Kindle copias de 1984 y Rebelión en la Granja.



El Diario El País de España amplía la noticia:

"Al margen de si la maniobra de Amazon está amparada, o no, por sus condiciones del servicio, para David Pogue, en The New York Times, la acción de Amazon es tan grave e inaudita como si empleados de una librería entraran de noche en nuestra casa, se llevaran dos libros de las estanterías y nos dejaran un cheque en la cocina."

Además de éso la nota agrega:

"Amazon ya lo ha hecho otras veces

TOMÀS DELCLÓS

No es la primera vez que un cliente de Amazon ve desaparecer una obra de su Kindle por una acción de la librería digital. Ha sucedido, según cuentan en los foros distintos internautas, con novelas de Ayn Rand y con copias de Harry Potter. Un cliente cuenta que Amazon le debe una explicación por haber borrado, "con nocturnidad y sin pedir premiso", cuatro obras de Rand de su Kindle.

Javier de la Cueva, experto en derecho informático, considera que jurídicamente la conducta de Amazon no es atacable en función de las leyes vigentes y de las condiciones del servicio de la propia librería digital. "Amazon estaría obligada a hacer lo que ha hecho. Lo ocurrido no es algo muy distinto a cuando se vende un producto con vicios ocultos. El vendedor debe retirar el producto y devolver el dinero a los compradores". Estaríamos, comenta, ante la figura jurídica de la eviccción. Y si hubiera sucedido en España, el argumento sería el mismo. Otra cosa, matiza de la Cueva, es analizar lo ocurrido desde el punto de vista de la filosofía del Derecho. La arquitectura de Kindle demuestra que permite a Amazon controlar lo que leen sus clientes y ello supone un atentado a la privacidad. Una merma de la privacidad del ciudadano que, sin embargo, éste ha autorizado. En la contratación mercantil hay frecuentemente una cesión de parte de nuestra privacidad.

El abogado Oscar Morales, del bufete Uría&Menéndez y profesor de derecho penal de la UOC, ha comentado a este diario que la medida tomada por Amazon responde a la Digital Millennium Copyright Act. "Una ultracautelosa interpretación de la misma", afirma. En Estados Unidos, la normativa que protege contra la vulneración de derechos de propiedad intelectual no es únicamente resarcitiva sino que tiene un componente punitivo que puede comportar una sanción multimillonaria.

Sin conocer los detalles del caso, Morales considera que cuando Amazon tiene la constancia de que está ofreciendo en su web una obra de la que el vendedor, en este caso un tercero, carece de los derechos, debe "hacer inaccesible la obra desde cualquier servidor de Amazon". Esta maniobra implica que desaparezca de los catálogos personales de los compradores y de su Kindle. En España, es más difícil que se reproduzca una situación idéntica. Según Morales, el prestador del servicio esperaría la existencia de una orden judicial -la ley habla de forma imprecisa de "la autoridad competente"- para retirar la obra porque si borrara la obra legalmente comprada, el cliente podría pensar que se le está impidiendo hacer lo que la ley no le prohíbe."




Hay un comentario en la nota del diario que me llamó la atención:

"EL libro electrónico es lo mismo que un MP3, no tiene nada que ver con lo que ha pasado, es el sistema de comercialización a lo "Itunes" donde cedes todos tus derechos, el problema es el servicio no el producto. Noticias así solo demuestran las ventajas de la piratería. Mi copia de 1984 no me lo quitará nadie, creo que lo he comprado en papel por lo menos dos o tres veces en losa últimos 30 años, ahora lo tengo pirata y es la única copia que sé que seguiré teniendo mucho tiempo. Mientras que siguen así no compraré un kindle jamas."




Es increíble que maltraten tanto al usuario, a la persona que compra un artículo...

Algo que no dice la nota es que mirándolo desde el Sur uno no puede dejar de pensar en los años de la dictadura cuando tener un libro determinado en la biblioteca podía significar tener que dar explicaciones o pasarlo mal o muy mal.

Ahora gracias a Amazon el trabajo de los censores y el de los posibles "servicios" es mucho más fácil ellos puede:

  • Borrar un libro sospechoso de todos los lugares , no hace falta más censurar físicamente, apretando un botón ya está.

  • Al mismo tiempo saben quiénes son los que tienen esos libros, quienes compraron esos libros y de esa manera podrían ponernos en alguna lista negra en definitiva nada de éso ocurre cuando uno obtiene un archivo pirata.
Si así defienden al copyright...Lo único que hacen es dar argumentos a los piratas

Pero ningún partido tradicional se meterá con ésto, a los senadores argentinos les interesa aprobar el Canon Digital..

Comentario de Julio A:

Lo que me llama la atención es que a alguien le hayan birlado justamente una
novela de Ayn Rand ... sencillamente me parecería contradictorio.
Me cuesta creerlo. Si hubiese vivido Ayn Rand, hasta estos años, luego de celebrar con júbilo el "Fin de la Historia", y el Triunfo del Capitalismo más Egoísta, hubiese escrito el panegírico más abyecto alabando a Bill Gates, a Soros, y en especial a Bezos y los fundadores de Amazon, así como perseguiría hasta el último aliento al que quiera leer un libro de ella, sin pagar su derecho en moneda contante y sonante.
Puede ser que no haya muerto y ya vieja, más que centenaria, o tal vez su fantasma que está migrando en Amazon, les borra los libros a quienes sospecha que no pagaron todo lo que debían por su "reading-right". Porque como vemos, no es un "copy.right", porque no se es dueño
de la "copia": no la puedo vender, no la puedo prestar, no la puedo regalar ...
ya no es ni un objeto ni una
mercancía.

No es un libro: es un simple "derecho de lectura".

Tal vez la versión 2010 del Kindle venga con un aromatizador a papel quemado, así te anuncia cuando te hayan eliminado un libro de tu "biblioteca".

Todo esto me hace acordar a otra novela de Bradbury. ¿como se llamaba?¿Farenheit? ¿Fahrenheit? No me acuerdo de la fórmula de conversión a grados celsius.
Y me pueden haber quemado la hoja donde lo tenía anotado.¿220 menos 32, dividido ...? no me acuerdo.
Socorro.
Saludos

Julio A




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