Se trata del poyecto del vereador (concejal) Beto Moesch de la ciudad de Porto Alegre, Brasil.El concejal Beto Moesch presentó, el martes (10/03), un proyecto de ley que prohíbe el uso de alimentos geneticamente modificados en los alimentos servidos en los comedores escolares de las 95 escuelas municipales de Porto Alegre (Brasil). Más de 56 mil estudiantes deben ser beneficiados. La iniciativa cuenta con el apoyo de la organización no gubernamental (ONG) ambientalista Greenpeace.
"Todavía no está comprovado que los transgénicos no presentan riesgos futuros a la salud de la población, de los animales y del medio ambiente", afirma el parlamentario. Para él, los alumnos de la red pública deben ser protegidos en virtud del princípio de la precaución.
La propuesta también preveé el estímulo al uso de productos sin agrotóxicos en el menú de las unidades de enseñanza. Según Moesch, el consumo de alimentos orgánicos, además de saludable, es educativo, pués coloca a la comunidad escolar en contacto con un sistema de producción que busca manejar de forma sustentable los recursos naturales.
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