Fuente Suplemento Link de O Estado de São Paulo
SÃO PAULO – En la maãna del martes, 14, Danilo Dara, uno de los editores de Mães de Maio no consiguió acceder al perfil del grupo en Facebook. Al intentarloguearse, recibió el aviso: “desactivado – cuenta no autentica”.
El perfil, que existe hace diez meses y está enfocado en denunciar abusos de la polícia y relatar casos de falta de respeto a los derechos humanos, había sido bloquedo. En el aviso, Facebook avisaba que “el perfil debería tener el nombre completo y verdadero”, y los perfiles deberían obligatoriamente representar al propio usuario. Crear un perfil para ideas, animales y objetos está prohíbido. “Su cuenta fue desactivada por violar los Términos de Facebook”, decía el aviso.
Dara siguió entonces los pasos proporcionados por Facebook para tener acceso a la cuenta nuevamente. “Respondemos las preguntas y a todos los pedidos que Facebook nos hizo, pero la página demoraba en volver”, cuenta.
La noticia sobre el cancelamiento corrió. Varias personas y páginas relataron la situación, clasificándolo como ‘censura’ y violación de la libertad de expresión. Ocho horas después, el perfil volvió a estar online. Todos festejaron. En la mañana de este miércoles, 15, habia un aviso de Facebook orientando a los responsables de que el perfil deberia transformarse em una página.
Según Dara, Facebook avisó que ellos podrián descargar y recuperar todo el historial del muro, pero hasta ahora no hubo ninguna señal sobre esos datos. “Estamos aguardando ansiosamente, pués este historial es fundamental para nosotros, un movimiento que lucha por el derecho a la memoria, la verdad y la justicia”, dice Dara. Entre los datos, están la participación del movimiento en casos como el incendio de la Favela Moinho, la violencia policial en Cracolândia en São Paulo y el caso de Pinheirinho.
¿Censura o un simple no cumplimiento de las reglas? Quien entró en contacto con Dara fue un sujeto identificado apenas como “Sandro” do “soporte al usuario Facebook”.
“El hecho de Facebook ser una empresa privada, con poder político, seguro que tiene un lado preocupante. Pero su amplitud superó el ámbito comercial. Sus páginas y las de otras redes sociales hoy son ocupadas por millones de organizaciones y miles de millones de personas de carne, hueso, alma y pies para sair en la calle”, dice el editor de la página. “Por lo tanto, ellos también tienen que tener una ética y compromiso total con nosotros”.
En la ley brasileña no hay reglas claras para definir la actuación de las empresas – al final, al pié de la letra, Facebook podria en tesis remover el perfil sin facilitar un backup. Es lo que dicen los términos de uso del site – y la regla es clara: está prohibido mantener un perfil que no sea personal.
Pero, para Dara, cualquier “actitud antiética” significaria la violación de los “derechos a la información y libertad de expresión de todos sus usuarios”. La situación, para él, hizo que tanto Facebook y la sociedad civil “entendieran el mensaje”. “¿Como podés violar el derecho de miles de personas interesadas en ejercer el derecho a la libre información posibilitado por Facebook?”, cuestiona.
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