jueves, 26 de enero de 2012
Sobre las Tarjetas SUBE para desmontar el sueño orwelliano
Sobre la tarjeta SUBE:
En poco tiempo, quienes quieran viajar en los medios públicos de transporte
deberán inexorablemente comprar su tarjeta SUBE. Para ello deberán concurrirán munidos de su DNI a cualquiera de las sucursales
de Oca, Andreani o Correo Argentino, donde llenarán un formulario en el que
volcaran los siguientes datos de filiación:
Apellido, Nombres, Tipo y Número de DNI, Teléfono, Domicilio con Calle y Número,
El SUBE otorgará graciosamente solo una tarjeta por titular. Un chip de control
ciudadano, ni más ni menos. Para mayor intranquilidad de los habitantes de Buenos Aires, el SUBE integra la
Dirección Nacional de Protección de Datos Personales, que a través del Ministerio de Justicia depende del Poder Ejecutivo Nacional.
La tarjeta SUBE contiene en su interior un chip que permite registrar una inmensa cantidad de datos, casi de la capacidad de un pequeño Pen Drive de 1 gigabyte.
TODOS los usuarios de SUBE, dejarán en la gigantesca base de datos que rápidamente se formara, un montón de información privada y que quedará al franco alcance de los funcionarios del gobierno para lo que ellos estimen sea conveniente políticamente.
La traza indeleble de sus movimientos quedará claramente registrada cada vez que utilicen un medio público de transporte, con nombre y apellido, dirección y una total identificación personal.
Se entiende claro que todos aquellos usuarios de SUBE dejarán la traza de sus rutinas diarias en manos de gente que no conocen, y que utilizará esa información para fines de control, como hacían los comisarios políticos en la época stalinista, solo que ahora totalmente modernizados, con costo casi cero y con total impunidad.
Tomado de Legnalenja
Una idea posible para desmontar esta terrible base de datos que se armará desde el Estado Nacional es la de fomentar :
Ferias de intercambio de tarjetas SUBE
La idea:
Que un grupo de personas se encuentre en algún lugar, puede ser público, con sus tarjetas SUBE.
Que las tarjetas estén vacías para que no haya que verificar si tiene o no tienen créditos.
Hacer un "pozo" común con las tarjetas de todos los que están.
Ir sacando de a una aleatoriamente las tarjetas.
Dentro de un tiempo que las personas se reúnan de nuevo y repitan la operación.
Así no será posible trazar un panorama de nuestros viajes habituales, con días, horas, líneas de colectivo, etc. etc..
Es una idea que puede perfeccionarse!!
La dejamos para que otros la perfeccionen. El objetivo es que no se haya un archivo de todos nuestros movimientos, es demasiada la información que les estaremos brindando!
En poco tiempo, quienes quieran viajar en los medios públicos de transporte
deberán inexorablemente comprar su tarjeta SUBE. Para ello deberán concurrirán munidos de su DNI a cualquiera de las sucursales
de Oca, Andreani o Correo Argentino, donde llenarán un formulario en el que
volcaran los siguientes datos de filiación:
Apellido, Nombres, Tipo y Número de DNI, Teléfono, Domicilio con Calle y Número,
El SUBE otorgará graciosamente solo una tarjeta por titular. Un chip de control
ciudadano, ni más ni menos. Para mayor intranquilidad de los habitantes de Buenos Aires, el SUBE integra la
Dirección Nacional de Protección de Datos Personales, que a través del Ministerio de Justicia depende del Poder Ejecutivo Nacional.
La tarjeta SUBE contiene en su interior un chip que permite registrar una inmensa cantidad de datos, casi de la capacidad de un pequeño Pen Drive de 1 gigabyte.
TODOS los usuarios de SUBE, dejarán en la gigantesca base de datos que rápidamente se formara, un montón de información privada y que quedará al franco alcance de los funcionarios del gobierno para lo que ellos estimen sea conveniente políticamente.
La traza indeleble de sus movimientos quedará claramente registrada cada vez que utilicen un medio público de transporte, con nombre y apellido, dirección y una total identificación personal.
Se entiende claro que todos aquellos usuarios de SUBE dejarán la traza de sus rutinas diarias en manos de gente que no conocen, y que utilizará esa información para fines de control, como hacían los comisarios políticos en la época stalinista, solo que ahora totalmente modernizados, con costo casi cero y con total impunidad.
Tomado de Legnalenja
Una idea posible para desmontar esta terrible base de datos que se armará desde el Estado Nacional es la de fomentar :
Ferias de intercambio de tarjetas SUBE
La idea:
Que un grupo de personas se encuentre en algún lugar, puede ser público, con sus tarjetas SUBE.
Que las tarjetas estén vacías para que no haya que verificar si tiene o no tienen créditos.
Hacer un "pozo" común con las tarjetas de todos los que están.
Ir sacando de a una aleatoriamente las tarjetas.
Dentro de un tiempo que las personas se reúnan de nuevo y repitan la operación.
Así no será posible trazar un panorama de nuestros viajes habituales, con días, horas, líneas de colectivo, etc. etc..
Es una idea que puede perfeccionarse!!
La dejamos para que otros la perfeccionen. El objetivo es que no se haya un archivo de todos nuestros movimientos, es demasiada la información que les estaremos brindando!
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